KURU
Ya se acerca Halloween: época de disfraces, de enmascararnos y asumir otras identidades. Podemos ser lo que queramos: desde un vaquero, un superhéroe, hasta un zombie. Sí, un zombie, esos seres que comen carne humana.
Ya se acerca Halloween: época de disfraces, de enmascararnos y asumir otras identidades. Podemos ser lo que queramos: desde un vaquero, un superhéroe, hasta un zombie. Sí, un zombie, esos seres que comen carne humana.
Y hablando de carne
humana, en esta entrada explicaremos qué significa la palabra Kuru.
Seguramente poco la habías escuchado, a simple vista la podrías relacionar con
un baile, una fruta o algo exótico, incluso un lugar. Pero no, esta hace
referencia a una enfermedad. Y sí, tiene que ver con la ingesta de carne
humana.
El Kuru es una enfermedad bastante
extraña causada por una proteína infecciosa (llamada prión) que se encuentra en
los tejidos cerebrales. Imagino que te estarás preguntando cómo se contrae. Una
tribu llamada “Los Fore” localizada en Nueva Guinea, como parte de un ritual
fúnebre, acostumbraban a comer la carne de sus deudos o difuntos como una forma
de homenajearlo: simbolizaba, en cierto modo, que la sabiduría y el espíritu
del familiar continuaría con ellos y formaría parte de su vida. Era una manera
de inmortalizarlos, no dejarlos morir.
Tribu en Nueva Guinea "Los Fore"
Mujeres y niños eran los más afectados por el Kuru
Las mujeres y niños
tenían el privilegio de comer la parte más blanda: el cerebro. Y es en esta
parte del cuerpo en la que se localiza esta proteína infecciosa. Por eso, el
mayor índice de mortalidad en estos.
Representación de un cerebro infectado con Kuru
En su lengua aborigen la
palabra Kuru significa “temblor”, dado que el infectado sufre
padecimientos de fiebre y frío. Entre otros síntomas de la enfermedad se
encuentran: dolor en las articulaciones (brazos y piernas), problemas de
coordinación para caminar, dolor de cabeza, dificultad para deglutir (por ello
muchos pacientes mueren de inanición y deshidratación en la etapa final de la
enfermedad), espasmos musculares, estados de ánimo muy cambiantes: desde risas compulsivas hasta letargos prolongados.
Aunque ya se conocía de
la misma desde principios del siglo XX fue solo hasta mediados de ese siglo que
comenzó a investigarse formalmente. Algunos síntomas se relacionan con enfermedades
en las vacas como la encefalopatía espongiforme bovina (EEB), también llamada
la enfermedad de las vacas locas.
Si accedes a este enlace podrás conseguir información
audiovisual sobre los científicos que estudiaron la enfermedad:
https://www.youtube.com/watch?v=OqjmLZjZpRE
El desarrollo de la enfermedad es lento,
ya que el período de incubación puede durar hasta treinta años. Sin embargo, apenas
se comienzan a manifestar sus síntomas es fulminante: los pacientes fallecen en
el lapso promedio de un año, por lo general, su desarrollo oscila entre tres a
seis meses.
Desde que la enfermedad
fue analizada científicamente en la década de 1950, el gobierno de Nueva Guinea
prohibió los funerales antropofágicos desde los años sesenta. No obstante,
entre 1996 y 2004 se han identificado 11 casos de Kuru en pacientes que
nacieron antes de la prohibición, pues, lamentablemente, los lapsos de incubación
oscilan entre los 34 a 41 años.
Si quieres conocer más sobre el tema visita:
https://www.nexos.com.mx/?p=33873
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001379.htm
https://www.nexos.com.mx/?p=33873
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001379.htm
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